¿Qué onda gente? ¿Qué creen? Me di cuenta que el mes antepasado logré escribir 11 entradas en mi blog y en mayo solamente fueron 4. Mamma mía! Hehehe. Eso de haber escrito tan poco en un mes no me gustó para nada, y prometo intentar superar (o por lo menos igualar) las once de abril, eh. Se lo merecen ustedes que me leen. Por que al final, éste blog es para ustedes. Lo que me lleva a escribir lo siguiente:

Bueno, pues resulta que me he puesto a pensar en un chorro de cosas últimamente y llegué a la conclusión de que, a pesar de que ha ayudado muchísimo (y hasta terapéutico me ha resultado en ocasiones), no he hablado más que de cosas personales (a veces demasiado) en mis entradas y me he olvidado de las entradas que daban de qué hablar en general; no solo de mí y lo que pasaba a mi alrededor de una manera bastante explayada. Y la neta, por lo menos a mí me gustaba más mi blog antes de todas mis broncas existenciales. Cuando ustedes me dejaban sus puntos de vista acerca de cosas en general, aplicables a la vida de todos nosotros como seres humanos y todo eso era mucho mejor. No creo que me dejen mentir en ese aspecto. Y pido disculpas por haberme desviado de la real intención de mi blog de la manera en que lo hice. Por lo que aprovecho éste mismo espacio para anunciar que voy a regresar a lo mismo de antes. Total, todo lo que me hizo alejarme del desarrollo chido y original de mi blog, está superadísimo, como lo dije en mi entrada pasada. Así que pues empiezo de nuevo. De nuevo, disculpas a quienes ya había hartado con mis cosas en lugar de entretenerlos. Y pues, continúo como antes de que pasara todo (pero más centrado, consciente y con los pies más en la tierra que nunca), así que ahí voy…

Últimamente he pensado en el cambio. El cambio en general. Nunca es fácil y jamás pasa de la misma manera dos veces, por más que uno lo intente, y en ocasiones se siente muy feo tener que afrontarlo, pero siempre, lo parezca en su momento o no, es para bien. Todo te deja cosas que aprender te guste o no. Y por lo menos creo que eso también está chido. Digo, ¿a quién no le ha pasado estar en una situación donde no queda de otra más que aceptar que las cosas son o no son de una forma determinada, y a fuerza tienes que hacerte a la idea? Desde una calificación “injusta” en la escuela, pasando por los desamores (si, si, ya lo sé… pero TENIA que decirlo o me iban a decir “hipócrita”, y para nada lo soy, ¿ok?), llegando a cosas feas de la familia y hasta el convencerte de que alejarte de tus amigos va a ser real y pues sí va pasar tarde o temprano. Pero como he dicho, he pensado que no debería realmente ser un problema. El cambio tiene que suceder. Además, una calificación siempre puede ser mejorada, los problemas familiares siempre se resuelven (aunque a veces tomen más tiempo del que uno quisiera), el amor te va a llegar también cuando menos lo esperes (sé que lo han oído y leído mil veces, pero por más que sea tedioso, neta que es cierto) y pues los amigos… esos por los que lloras y sufres desde que sabes que la separación tiene que llegar aunque sea para verse tiempo después (cuánto tiempo no se sabe con certeza, pero esos lapsos de tiempo también llegan a su fin en algún momento), pues si en realidad son verdaderos, vas a ver que siempre, SIEMPRE van a estar ahí para ti. O sea, por lo menos nos tocó vivir en una época donde un amigo sólo está a un e-mail, un phonazo o un mensaje del móvil de distancia, ¿no? ¡Imagínense pasar por eso sin tanta tecnología! Y sin embargo, la gente asimilaba el cambio y lograban mantener buena comunicación. ¿Por qué no hacerlo nosotros también, si la neta, la tenemos más fácil, ¿no? Después de todo, dicen que “un ‘hola’ siempre es el inicio de un ‘adiós’” y pues es cierto... creo. Digo, suena bastante lógico, seamos honestos.

Dice Rafiki en “el rey león”: “El cambio es bueno pero no es fácil.” Y yo creo en esa filosofía también. Para todo hay momentos, y como ya he dicho (y comprobado de más en éstos últimos días), yo creo que hay que quedarse con todo lo bueno que se vivió al lado de alguien y ya. Siempre puedes hacer a un lado a esa persona (o personas) desagradable que te hizo daño y en quien confiabas, a esa maestra que te hizo la vida de cuadritos, a ese niño que te molestaba solo por molestarte y pues al final, lograrás dejarlos atrás; pero mejor piensa en todo lo bueno de la vida que tienes AHORA. Por ejemplo, yo sé que tengo verdaderos amigos y que aunque algún día tenga que separarme de ellos por lo que sea que ocasione la separación, van a ser mis amigos siempre. Y siempre los llevaré en mi corazón vaya a donde vaya y esté donde esté y con quien esté (como he tenido que hacerlo ya anteriormente para llegar a Cancún, aunque sí, ok, reconozco que no eran tantos como los que dejaré el día que yo tenga que irme de aquí, pero sí igual de valiosos para mí). Y creo que ese es el cambio más cañón que he experimentado en mi vida: El hecho de no dejar nunca de ser niño, pero empezar a abrazar la madurez por fin, en lugar de temerle y tratar de cerrarle la entrada a mi vida. Y, ¿saben algo? Me da gusto poder compartir eso con ustedes. Muchas gracias por estar ahí siempre que los necesité, y espero que sepan que por el tiempo que me quede a su alrededor, les sigo ofreciendo mi amistad al por mayor, pero eso si… sin esos momentos de acidez y frustración que me han atacado tanto (y que me han tenido que aguantar aunque no fuera su responsabilidad) últimamente. O bueno, si no del todo, prometo bajarle cañón a esos arranques, ¿vale? Hehehe.

También les cuento que (siguiendo en el mismo tema, o sea, el cambio) hay gente nueva en el grupo de Por Amor al Arte. Bueno, no gente nueva como tal, pues son del Canal 33. Y creo que también es un buen cambio. Nos unimos para lograr mayores y mejores resultados y se siente una buena vibra de la mayor parte de ellos, y aunque son mas chavos que nosotros, insisto en que parece que se avecina algo muy padre. Les digo, parece que sí es una época de cambios y creo que atiné en escoger ese tema para ésta entrada... ¿Qué deparará el futuro? Lo que sea, estoy muy curioso y lleno de emociones sin final y también estoy mega cargado de energía y pues eso al mismo tiempo, me da más. ¿Así, o más chido? ¡O sea…! Hahaha. Aprovecho éstas líneas también para darles una bienvenida, chavos del 33, al grupo de Por Amor. Una sincera bienvenida, neta. Que sea el inicio de lo mejor que Cancún ha visto jamás, ¿vale? A trabajarle durísimo. Y a demostrar que sí podemos.

Y pues, gente, por ahora los dejo. No olviden ir a ver Peter Pan el 7 de junio, ¿ok? Boletos a la venta desde ya. Quedan muy pocos días para que los compren y pues sí vale la pena cañón, neta. Los quiero a todos mucho y pues les recuerdo, siempre estarán en mi corazón. Muchísimas gracias por ayudarme a crecer. Espero no fallarles amigos, por que merecen lo mejor de mí así como yo tengo lo mejor de ustedes. Gracias por leerme, y plis no olviden firmar el blog y dejar sus comentarios. ¡Animo y mejores deseos hoy y siempre!

Su compañero, amigo, novio y hermano (pero ante todo, ser humano):

Josh.